Duérmete corazón
y que nada te despierte,
y que nada te despierte,
ni la luz de la luna cayendo sobre ti
ni las palabras que tus motivos humedecen.
Deja los asombros a las esquinas,
a los transeúntes que las doblan con sus fantasías.
Tú, sigue en el letargo, que todo es mentira,
la luz es sólo un efecto que se apaga luego,
las promesas aire que se verbaliza en sonidos
pero duran, bien lo sabes, lo que dura un suspiro.
Duerme, que arrecia la lluvia afuera
la noche está oscura, se apagaron las estrellas
y tú sin motivos tiemblas. Que fríos te llegan?
que distancias invisibles fisuran tu estructura,
aceleran tus latidos y te bañan de nostalgias
corazón herido?...
No hay comentarios:
Publicar un comentario