Se difuminan las palabras
mostrando el verdadero pensamiento
y vuelve con la calma
la luz pura de los sentimientos.
Retornan
hasta sus nidos
las
golondrinas que emigraron
Vuelven
a los latidos
de tu
corazón enamorado
No se nadar en un mar
donde no encuentre tu reflejo
ni el salvavidas amarillo
atado al calor de tus besos
Como
la sal con el agua
en el
infinito océano
irán
unidas nuestras almas
por
los tiempos de los tiempos
No se caminar en mi calle
ni en los terruños de la vida
abandonado por tu sombra
en mi primavera florida.
Y soy
el cáliz abierto
de la
flor del almendro
Suspirando
mis sentimientos
añorando tú recuerdo
No se respirar el aire
al que le falta tu aroma,
porque sólo mi cuerpo sabe
del olor de tu persona.
No se de
fronteras ni límites,
cuando se
trata de ti,
en tu
cuerpo tengo mi bandera
mi
follaje y raíz