Si pudiera devolverte hasta la cuna
y dejar de andar oliendo tu recuerdo
Si te pudiera acunar cómo la luna
y mecerte cómo ella mece al lucero
No pudieron mis días crecer contigo
fuiste breve cómo gotas de rocío
Muchos años he tardado y no consigo
comprender que en realidad no eras mío.
Te dí la vida, pero tú me eras prestado,
desde el cielo alguien más te reclamaba
dos meses y medio tuve un ángel a mi lado
que al partir dejó mi alma desgajada.
Maldije a la vida y repudié a la muerte
cuestioné a Dios y su designio,
con la voz quebrada le increpé fuerte
!Que te hice! ¿porqué te llevaste a mi niño?
Cómo el ala de un pájaro fracturada
la vida se paralizó por el dolor.
Acepté que en mi tristeza Dios me amaba
y busqué reconciliarme con su amor.
Aún hoy tú recuerdo escuece el alma
más en mi alma ahora hay resignación
Se que estás junto a los ángeles y en calma
esperas un nuevo encuentro entre los dos.