Que no silencie a la noche
la melancolía y su canto
que cuando la luna se asome
desaparecerá mi quebranto
Bajará su huella plateada
marcando camino en mi cuerpo
mientras mi boca embrujada
se hace esclava de sus besos
Y allí donde rompe la aurora
la oscuridad y sus miedos
tendremos relojes sin horas
para vivir nuestros sueños
Dirás que te pertenezco
cómo el jazmín al jilguero
y en medio de mil juramentos
volveremos a poseernos
Que no silencie a la noche
la melancolía y su canto
que de amor haremos derroche
hasta llegar a saciarnos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario